Me voy a comprar dos Kalashnikov, que están de oferta

En mi casa se cena a las nueve de la noche, pero voy a tener que cambiar el horario, o lo que es más lógico, tendré que apagar la televisión a esa hora, seria lo mas sensato. 

Todos los días me pongo de los nervios oyendo las noticias, yo les digo a mi gente que me voy a comprar un Kalashnikov, lo voy a cargar con cartuchos de sal o de confetis y me voy a ir a pegar tiros por todos, por los que se meten con el gobierno, con el que hace las fiestas con pandemia, con los que no saben estar en casa tres días seguidos, con todos l@s imprudentes que se creen estar por encima del bien y del mal. 

Y ahora también me la llevaré cuando vaya a la compra, porque jodo. Estás en fila, llevas ya mas de 15 minutos y cuando te va a tocar: ¡zas !, el de delante de ti va con pedido, y te dicen a ti y a todos que estamos en la fila que pasemos por otra caja. ¡¡Ala la chúpete otros 15 minutos de fila!! 

Y luego está la señora de turno, lenta de nacimiento y que vacía la cesta a ritmo de caracol, se lía con sus cuatro cosas, las va amontonando en un rincón de la cinta de Cajera, poniendo las cajas de leche encima de las bolsas blandas y al darse cuenta vuelve a cambiar todo, no le caben bien en el poco esapcio que le ha dejado la cajera que ya sufre también, empuja, mira, las vuelve a cambiar, estruja los tomates, sufres por ellos que los ves coloradicos y llorando, y cuando menos te imaginas…, levanta la cara de pena y te mira como diciéndote: —¡Coño! no me pongas nerviosa. 

Y es que andamos todos con mas o menos prisa, con distnacias de seguridad que hacen eternas las filas, y hasta que no se va ella no podemos poner nada nosotros. 

¡¡Que no ha acabado!!, que ahora mira bien los cambios, los guarda bien despacico para nada, y con toda su pachorra se va a por el carro, que yo pensaba que se había ido a New York a ver como iban las eleciones…, y seguimos esperando, y por fin aparece mete todo y se va.

P�ero cuando salgo a la calle… en la mismísima puerta…  ahí esta mirando el ticket, menos mal que no lo ha mirado dentro, que si no creo que hoy comemos en la tienda. 

Lo he decidido, me voy a comprar dos Kalashnikov en Amazón por menos de 80 euros, que con uno hago corto, y pondré en uno gel hidroalcóholico para desinfectar mis nervios y las pachorras de los lentos. ¿Parezco nerviosa? Pues eso. Y en el otro igual les pongo colonia de Pachuli para que se espabilen.

La tapa del WC siempre abajo, que por eso se llama tapa

Yo no se si todos los hombres son iguales como decía una serie, pero el mío es de los que dejan la tapa de la taza del water bien levantada.  Hoy casi me meto dentro y se me traga el sumidero, si no fuera por lo gruesa que estoy de los nervios. Si llego a estar delgada se voy seguro. 

Y el susto que me he dado a las tantas de la noche. Claro te levantas dormida todo apagado y sin luz… te vas a sentar y ¡zas! Adentro de la taza. Esa sensación fresca de lo que no te esperas te levanta el ánimo hasta casi el insulto.

Y no será por que no se lo he dicho mil veces, pero como si oyes llover. 

¿Que hago? Estoy por pegar la tapa. Entre comprarme otro WC con la tapa incorporada u otro marida con la tapa metida en los sesos… pues que estoy dudando.

Hoy le he dicho que tenga cuidado, que salen serpientes y se comen los huevillos si ven luz ambiente. Pero me ha mirado con cara de pavo. ¡¡Uff!!