Queridas lectoras y amigas, ya sé que hace mucho que no escribo y no sabéis la bronca que me ha echado mi hijo cuando se ha enterado. Así que aquí estoy sin saber muy bien qué contaros pero de cuerpo presente, es decir sentada frente a la pantalla; la verdad es que cosas nuevas tengo, pero como no son muy agradables pues e preferido no escribirlas; no está bien, lo sé, por que viene bien desahogarse, pero en estos momentos no tengo ganas mas que de hacer lo justo y descansar.
A mi yerno lo ingresan el miércoles para el trasplante de médula ósea, con lo cual un mes por lo menos que voy a tener entretenimiento, si es que me toca ir a cuidarlo, que ya nos han dicho que nada de visitas, y el que esté de visitas como poco ocho horas con el paciente y una persona solo para no contagiarle nada, entrando y saliendo.
Los que me conoces por estos lares ya sabéis como soy…, un pocico baja de espíritu, de moral y de tensión :-). Joder qué bien he quedado. Vamos que soy una deprimente, que es lago parecido a una deprimida.
Solo me faltaba el calor que llevamos todo este mes (y lo que queda), para estar más baja si se puede de todo. En fin, lo llevaré como pueda y sepa y procurare escribir un poco más a menudo. La foto me la ha puesto mi santo para fastidiarme un poco. Es eso, un tipo con otra forma de mirar las cosas.
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