Se me va hacer un poco duro volver a estos lares blogueros pero lo voy a intentar con ganas. El caso que yo ya empezado con mi blog y no veo yo que mi santo vaya hacer lo que yo quiero que haga. Andar vale, pero Pilates no creo que lo logre convencer, ya contare. Es el trato al que hemos llegado para retomar mis trabajos de bloguera esporádica y torpe.
Este año de momento no me he apuntado a clases de Pilates por que tengo pendiente unos cuantos viajes y no es cuestión de pagar y no ir, así que habrá que hacer ejercicios en casa. Y para no hacerlos sola he pillado a mi santo que me mire y me ayude con sus participación.
El primer viaje que ya tengo apalabrado es uno por Castilla León en viaje organizado que nunca lo hemos hecho, digo organizado y con guía, por pueblos pequeños que si no tienes coche es muy difícil de visitar y como no tenemos pues de alguna manera tendremos que visitarlos.
El segundo, por nuestra cuenta y más complicado es ir a Birmingham; tenemos allí a mi hijo, terminando su Doctorado en Economía y por supuesto vamos a ir; ya no por verlo a él —que también— si no que con la excusa, veremos otra ciudad que si no hubiera sido por este motivo seguro que nunca hubiéramos visitado. Somos coleccionistas de ciudades.
Así que ya os iré contando cosicas de las mías, de esas que escribía antes. Y prometo que serán alegres. Debe ser las pastillas que ya hacen sus efectos sobre la alegría personal.

No hay comentarios:
Publicar un comentario