Estuve en la Puerta del Sol, y así ya puedo opinar. Creo.

Nada como irme unos días a Madrid, para ver en directo la Puerta del Sol y sus indignados.
Impresiona, os lo juro, sobre todo en fin de semana en donde si queires cruzar la plaza te tienes que meter en unos fregados de miedo para una cincuentona, os lo juro.
Mi santo se empeñó y me metió por todo el barullo y pasé diez minutos algo acoj…, asombrada más bien.
Hay muchos turistas haciendo fotos, y muchos visitantes que van o que vamos a ver, a mirar. Así que no se quejen los de las tiendas, que no tienen razón. Eso si, lo tienen todo muy limpio por el suelo, pero muy sucio por las paredes, llenos de carteles con frases y poemas, pero que la lluvia se ha dedicado a estropear en muchos casos.
Son jóvenes sobre todo cabreados, y debemos entre todos intentar resolver esta historia o dentro de pocos años ellos mismos tomarán medidas mucho peores, pues no tienen futuro laboral.

Todos con los jóvenes en sus manifestaciones y cabreos

Como dice el dicho: “más vale tarde que nunca”.

Y eso es lo que están haciendo los jóvenes en las plazas de España, manifestar su mal estar por las cosas que les estamos haciendo entre todos.

Los empresarios, el Estado y los padres; que algo de culpa también tendremos, digo yo, no siempre tienen las culpas los demás, de nuestros errores.

Ayer fuimos a la Plaza del Pilar que es donde están reunidos en mi ciudad, y la verdad me asombré del montón de jóvenes que había y de la gente que les lleva cosas.

Siempre está el tonto de turno que se tiene que quejar de todo, y hay que oírles decir cada cosa, que es mejor callarse por no discutir con los bobos de pensamiento bobo. (Quiero decir por la gente que va a ver lo que se guisa)

Solo espero que sirva para algo y que no sea “un pasar el rato” para los que lo tiene que escuchar y ver. Ya sé que es difícil, pero algo tiene que pasar para que esto cambie, y no solo cambiar en estas elecciones, si no en lo real, en el día a día.

Que se jubilen los que están enfermos, que dejen trabajar a los jóvenes pero no con contratos basura, por que lo de mileurista no se donde será pero algunos y ya mayorcitos, no llegan ni a los novecientos euros al mes y viven, claro que viven, pero ¿cómo?, pues como pueden y rascando de los padres que puedan, que otros ni eso.

Así que me parece muy bien que los jóvenes se quejen y que armen bulla, ahora que tienen fuerza, que nosotros los más mayores ya nos movimos cuando éramos jóvenes; pero si hay que moverse otra vez, pues todos unidos haremos más fuerza.

En las fiestas estamos acostumbrados a sufrir por tontos

Creo que a las comuniones, bodas y bautizos, y en definitiva todo lo que suene a fiesta familiar, deberíamos ir cómodos para poder pasarlo bien de verdad. Pero no, somos unos “masocas” y aparte de ponernos nuestros mejores vestidos, nos ponemos los zapatos nuevos y de tacón, buen tacón, para parecer mas alta.

Hoy he visto a una señora (gruesa de los nervios como yo) que iba de Primera Comunión; eran las 11 de la mañana, todavía no había llegado a la iglesia y ya se le notaba que andaba mal.

De vuelta de dar mi paseo de media mañana me la he vuelto a encontrar ya después de salir de la celebración religiosa y ya llevaba sus zapatos con la tira de atrás suelta. Me imagino que terminará con los zapatos en la mano.

¿Pero por que somos tan tontos para castigarnos nosotros mismos si ya nos castiga la vida por si misma?

¿No vas a pasártelo bien?, pues chica, disfruta del día, ponte zapatos cómodos, no digo que las zapatillas de casa, pero ahora vendes unas merceditas(zapato plano) que los hay majísimos, pues ¡coñe! si no estás acostumbrada a llevar zapato de tacón y encima estas gruesa de los nervios, ¿para qué sufrir?; y no ya ese día, sino los días siguientes que son peores por que llevas el pie lleno de ampollas y entonces si que tienes que ir con alpargatas. Si quiere que sufra el comulgante, que haga él la penitencia, pero tu ya has hecho la penitencia de ir sin ganas, de juntarte con gente que no te apetece nada y encima hacer el regalito, que no es por el precio sino por que no sabes qué regalar ahora que ya los chavales tiene de todo.

Yo esto de las actuales comuniones y bodas, como que no lo veo bien; comulgar sí, pero sin tanta parafernalia costosísima. Claro que como dice el dicho, para presumir hay que sufrir, aunque no esté de acuerdo ¡eha!

El barrendero de mi barrio es un gran trabajador. Y lo digo de veras.

Están tan pobres los ayuntamientos de nuestro bendito país, que los currantes barrenderos parece que tienen que ir cogiendo los papeles y las colillas del suelo con la mano; se ve que no tenía escoba, por lo menos el que he visto yo hoy. O a lo mejor es quería hacer ejercicio subiendo y bajando el cuerpo serrano para ponerse en forma.

¿Pero él sabe que eso es muy malo para la espalda?, yo creo que sí, por lo menos para la edad que tenía y el trabajo tan duro que le ha correspondido lo tendría que saber.

Pero no uno, no, ni dos papeles, no; toda una calle se ha hecho, mientras yo esperaba el autobús. Me estaba dando dolor de riñones de verlo agacharse, os lo juro.

Me han estrado ganas de ayudarle (con la boca pequeña), pero lo he pensado mejor y por mi espalda no le he ayudado. Que luego él se cojera la baja y yo me quedaré con mi dolor de riñones y sin baja.

En fin que estamos un poco locos, por que luego le he visto ese pedazo de escoba que llevan, que abulta más que yo, que ya es decir. ¿Entonces por que lo hacia antes con la mano?— me he preguntado, ¿para dar pena?, ¿pero pena de qué? ¿una apuesta?

Cada uno tiene su trabajo y todos los trabajos son muy dignos y necesarios. Lo malo que cuanto mas duro es el trabajo menos cobras de sueldo. Así va el mundo Facundo. Hay trabajos que están muy poco pagados. Creo.

Estamos con Lorca y Murcia. Mucho ánimo.

Había escrito una entrada dándoles ánimos a las gentes de Lorca, de Murcia, por su terremoto. Pero me dice que mi santo esposo que me la hna borrado los "jefes" del internet, los dueños de Blogger, que se han tenido que arreglar borrando entradas, para resolver no sé qué problemas.

Que me digo yo, que vaya lío si esto tampoco es seguro, pero bueno.

El caso es que ahora ya no me sale igual que ayer, decirles a los loscanos que lo siento mucho y que lo que hay que hacer es tener fuerza moral para continuar y para levantar otra vida sobre los escombros de sus casas.

Sólo ellos saben lo que es perder la vivienda de golpe. Bueno en los últimos meses hay muchos embargos, así que me callo.

Ánimo y ser fuertes, que lo vais a necesitar.

Solidaridad con los lorquinos y lorquinas tras el terremoto

Un abrazo de solidaridad y de amor para todos los murcianos y lorquinos en concreto, en horas muy duras, de mucho miedo y con grandes temores.

Nada podemos hacer, cunado la naturaleza se nos pone dura y nos asusta, somos muy débiles y debemos aguantar y seguir pensando que esto pasará pronto y que debemos volver a la vida normal en cuento podamos.

Hay que ser fuertes, y lo digo yo que siempre me estoy quejando de todo, pero bueno. No sé que hubiera pensado yo de verme en estos trances, ¡Dios mío!

Muchas suerte para todos. Y que ahora las viviendas estén bien y se pueda vivir en ellas, que esa es otra. Paciencia.

El caso de un brazo, con el sistema operativo algo anticuado, os lo juro

Mi santo esposo, no sí si como esta todo el día en el ordenador o qué, el caso es que esta noche a las 3 de la madrugada, durmiendo todos como ceporricos, me ha cogido el brazo y me ha dicho gritando: —A ver, ¡déjame verte el brazo! Que te tengo que cambiar el sistema operativo del brazo.

Os lo juro —¿Pero de mi brazo?— le decía yo totalmente despierta y casi asustada, y él insistía en que si.

Le he tocado la frente por si acaso estaba delirando y no, estaba frío, le he preguntado: —¿Estás dormido? Y él me ha dicho que si, con toda la tranquilidad del que sabe lo que responde, pero insistiendo en que me quería cambiar el sistema operativo del brazo.

Y yo riéndome, os lo juro, aunque visto desde ahora casi me entran miedos y no risas, pero en fin. Mi hijo asustado se ha despertado sin saber si yo estaba riendo o llorando. El caso es que el santo dormido, se ha dado cuenta de que llegaba su hijo o alguien al dormitorio, y va y le pregunta: —Pepe, ¿a que a los brazos hay que cambiarles el sistema operativo?

Por cierto, mi hijo no se llama Pepe.

Claro, digo yo, como a él le han puesto un aparato en el corazón con mando, pues se conoce que me quería quitar los brazos para actualizármelo o vete a saber con qué puñeteras ideas.

Claro está, cuando nos hemos levantado todos no se acordaba de nada, menos mal que estaba mi hijo de testigo, si no la loca hubiera sido yo.

Y es que tiene tantos aparatejos por su mesa de despacho o sus cajones que no puede ser; tendré que esconderle alguno por algún tiempo.

Lo malo que el ordenador es muy grande para meterlo en ningún sitio. Para mi que se ha confundido mis brazos con su nuevo juguete. Un iPad que dice que habla y todo. Seguro que más que él.

Os juro que esta noche me acuesto con una gayata en la cabecera para darle en la sesera como me quiera cambiar algo de mi cuerpo. Ya se lo he dicho.

Las ventanas con cristales son el peor invento para las amas de casa

Que duro es ser ama de casa. Me gustaría a mi, ver a todas esas ejecutivas y ministras trajeadas todo el día y bien pintadicas, cómo limpian ellas en su casa, sobre todo los cristales, que si poco me gusta planchar, menos limpiar cristales y anda que para eso no tengo. Claro que si alquilamos a otras mujeres para que hagan el trabajo de las mujeres y hombres que no quieren, eso no vale como igualdad, pues compramos el trabajo de mujeres para que nos hagan el trabajo de todos, sean mujeres u hombres.

Mi hijo se ha puesto a ayudarme y ha durado dos cristales y por dentro, que es lo fácil.

Por fuera me ha dicho que le daba miedo y adiós; que me he quedado otra vez sola.

Es que son ventanas corredizas, si por lo menos fueran de libro, se harían mejor.

Mi santo nunca me ha ayudado y hoy menos que lo tengo convaleciente; le han puesto un aparatico cerca del corazón para estudiárselo y como aunque solo le hicieron una raja, se lo metieron a presión y claro le duele, así que un ayudante menos.

En fin que las mujeres amas de casa estamos muy mal consideradas, sobre todo las que no trabajamos fuera de casa, pero trabajamos más que algunas que enseguida contratan a otras mujeres para hacerles su trabajo, y encima nosotras, las amas de casa ,sin cobrar, ¡chúpete esa! ¿Deberían pagarnos sueldo los maridos por el trabajo que les hacemos en casa?

Esto lo escribo en un descanso de la limpieza y me parece que por hoy ya he terminado, mañana la otra mitad. Estoy meditando esto de cogerme más propina, para comprarme más vicios, a costa de los puñeteros cristales.

Las bodas reales son como las bicicletas, para el verano o la primavera

Tema “importante” del día para la gente a la que no le gusta ver muertos en la televisión o las revistas, el partido del futbol de ayer y la revista Hola.

Hoy he estado en la peluquería para cortarme el pelo y ponérmelo un poco rojillo (como el corazón y como los del Barsa), aunque no entiendo de futbol y soy de Zaragoza, me gusta el Barsa y el Atlético de Madrid, oye cada uno tiene sus gustos, y por supuesto del Real Zaragoza. Vamos, que me gusta sufrir, que ya lo digo muchas veces.

Bueno a lo que iba, que en la peluquería también se hablaba del partido de ayer, hablaban las mujeres en nombre de sus maridos, por que eran todas como yo, poco entendidas, pero el caso es hablar de algo.

Y por supuesto del bodorrio Real del viernes, vaya tochazo de revista Hola.

¿También les habrán pagado exclusiva a los jilipollas… perdón, a los novios reales?, lo digo por que como a las famosas que salen en portada les pagan un pastón; pero ya me han aclarado las entendidas de estas cosas, que no, que esto no habían cobrado y que los regalos de la boda los han donado, pues que bien, que buenos chicos.

He preguntado a quien se los han dado, pero eso ya no lo sabían las señoras que parecían saberlo todo en la peluquería.

Y se admiraban que no se fueran de viaje de novios; serán inocentes las de la pelu, yo me he callado para no dármelas de entendida ☺, pero si estos “reales” están todo el día de viaje de novios, ¿alguien sabe a qué se dedican?; él militar, ya lo sé, pero que es ¿soldado, sargento, coronel?, ¿y ella?, ni lo sé ni me importa, ni falta que le hace trabajar a nada la verdad.

En fin que sean felices y coman perdices como en los cuentos, por que eso es lo que parecían todos los que fueron a la bodorria esa; tanto el viernes como hoy se veía todo en las revistas como un Cuento de Hadas jilipollas o de Reinas en busca de su sapo. ¿O era al revés?

Primera Comunión mentirosa y con pecados

Ayer estuve de comunión. Quiero de decir de Primera Comunión. Comulgaba mi sobrino/nieto. Ya que su padre es mi cuñado/hijo adoptivo, pues desde que se separó estamos ejerciendo casi de padres.

Bueno pues eso, que fui de Primera Comunión, solo a la celebración de la misa, ya que el banquete era solo para la familia de la madre del niño en cuestión. (Y mejor así).

Cuanta hipocresía hay en estos eventos. Los niños iban con el uniforme del colegio, sin disfrazarse, pero claro para eso ya están las familias que había algunas que no les faltaba ni la pamela. Pero lo que más me sorprendió fue la cantidad de gente que pasó a comulgar, Tres veces tuvo que ir el cura carca —que esta es otra— a por Formas al sagrario.

¿Pero como se puede pasar a comulgar, cuando has hecho lo posible para destruir un matrimonio, y cuando no le diriges la palabra a tu sobrina, que además son los padrinos de la misma, solo por que la criatura no ha querido declarar en contra de su padre?

Que pasa pues, ¿que como se lo dices al cura ya estas perdonado?

Y el cura ¿no les ha puesto de penitencia ayudar a su sobrina, ahora que es cuando mas falta le hace?

Bueno, pues eso, toda la gente muy encopetada y comulgando para dejarse ver, pero no echaron dinericos en la cesta de pedir, ni para pagar las hostias que se comieron.

La primera yo, pero yo ni creo del todo, ni pasé a comulgar. ¡Ah! y fui de vaqueros, informal totalmente pues como no me invitaron a nada, como fui de escondidas, no me apeteció ir disfrazada de guapa. Por cierto, mi cuñado lo pasó fatal con los sinsabores de una Primera Comunión en la que tampoco le invitaron a la comida. Simplemente era el padre que puso la semillita. Nosotros le dijimos de celebrarnos a nuestra manera, pero no quiso, prefirió el dolor del día.