Mis viajes en tren se llenan de señoras impertinentes

Cómo no; en todos los viajes tiene que haber alguna listilla. Se necesitan para darle salsa a los viajes. En este último me he encontrado con dos; claro, que como era largo es normal.

Primero una quejándose de que si era muy largo el trayecto. Ha llamado a todas sus amigas del pueblo para contárselo, como hablaba muy alto nos lo hemos aprendido de memoria todos los viajeros, eso y por las veces que lo ha repetido: “que mire usted cuatro horas y media desde Sagunto a Zaragoza”; “pues no me dice el de la taquilla que es un Intercity y que va muy bien”.

Escucho, mejor dicho, oye la señora por megafonía: “El tren de media distancia con paradas en todas las estaciones hasta Zaragoza va a efectuar su entrada”, y va y nos dice a todos gritando: “El próximo día me voy hasta Valencia y así cojo uno más rápido”.

Bueno, es que no podía parar de reírme, entre lo cansada que estaba (y cuando estoy cansada me da por reírme) y la señora con su tono, era para partirse. Lo que ella no debe saber es que si va hasta Valencia va a tener que pasar por Sagunto y que todos los trenes de este recorrido son igual de lentos, más largos, más corto el recorrido, pero todos son igual de lentos.

La verdad es que van al paso de la tortuga coja. Pero  cuando coges el billete ya te pone a qué hora sale y qué hora llega. Y si es un tren Intercity, que es como si fuera esos de madera de los de antes.

La otra es otro tema, esta iba de pasota, ha llegado, se ha sentado donde le ha venido bien y cuando el joven que se tenia que sentar ahí le ha dicho que era su asiento, la del bolso de Prada sin mover una ceja le ha dicho que daba igual, que ella no se movía, que había muchos asientos vacíos. Y efectivamente, el joven se ha tenido que poner en otro asiento por que la señora impertinente hablaba bajo y ni miraba al joven; anda que no sabia ni nada. Su asiento era de los que van al contrario de la marcha,  y aunque sobraban asientos, sobraban para todos y sobre todo es la forma de decirlo; es lo que no me gusta de algunos mayores y mira que yo también soy casi mayor pero que por ser mayor tiene que tener razón , pues no.