Lo primero quiero felicitar el año nuevo a todos los lectores. Quería haberlo hecho antes, pero me ha sido imposible, he estado muy liada con mi familia, con mi hija.
El año ni termino ni empezó muy bien debido a temas de enfermedades que ya parecen un poco resueltos, cosas de cervicales, mareos, “devueltinas” y todas esas cosas, que más parecía una borrachera (que no era, por que yo conozco muy bien a mi niña aunque todas decimos lo mismo), más que nada por que estuvo conmigo la Nochevieja y vi lo que bebía, CocaCola Zero, que es esa agua negra que no sabe a nada.
Bueno ya se le ha pasado, después de unos días tontos y hoy nos han dado una buena noticia alguien ajeno a mi familia, no, no está embarazada mi hija, si es eso lo que estáis pensado, es una noticia que cuando la tenga bien confirmada la contaré, es nuestra, no de mis hijos. Algo bueno nos tenia que pasar y parece que así ha sido.
A lo mejor es verdad que existe Dios y que los rezos sirven para algo. Estaba por tirar la toalla, pero voy a seguir rezando como todas las noches por mis hijos y mi santo. Que me he vuelto a animar, seré tonta.
No fuimos a Urgencias con mi hija (y cambio de tema pues la noticia buena todavía no es oficial) mas que nada, por que estos días si vas al médico con mareos creo que te sonríen y te miran con cara de cachondeo, se piense que es una borrachera, pequeñita eso si, y no les atiendan, por que esto pasó en el Madrid Arenas con el Samur, pero también en Jaca hace unos días con un conocido, que fue con un traumatismo y como iba bebido no le hicieron caso, lo mandaron a casa, y tras sentirse peor que lleva dos meses ingresado, pues lo que parecía una borrachera era un buen traumatismo craneal, estuvo en coma unos días y de momento no se ha ido al mas allá, pero ha vista el túnel y está lleno de mareos.
Espero que este año 2013 (que yo no soy nada supersticiosa) sea un poquito mejor que el pasado. Tengo ganas de contaros la noticia buena, pero no puedo, no puedo, no puedo.
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