Los hombres del tiempo es que últimamente se suelen equivocar poco. Dijeron que hoy bajarían 10 grados la temperatura y así ha sido. Esta mañana he estado tomando el sol en mi terraza, y por la tarde —que he vuelto a subir para que se echará unas carreras el perro—, me he tenido que bajar a buscar una chaqueta.
Pero vamos que yo lo agradezco que sea así, por que el calor que nos hizo ayer no era normal. Eso si, ha servido para que mis arbolicos se hayan puesto muy majos con flores y hojas. Lo malo que ahora se levanta el aire y adiós todo.
Nunca estamos a gusto con lo que tenemos, es verdad, la cuestión es quejarnos. Pero nos viene bien para poder hablar en el ascensor. Por que si no ¿de que hablarías en los ascensores cuando vas con el vecino?, pues del tiempo, es una buena conversación para tan poco rato. La otra manera de pasar los segundos es mirarse a la nada, como quien no quiere la cosa. ¿Os habáis dado cuenta de lo tontos que nos quedamos cuando sube alguien desconocido en el ascensor y miramos al suelo o a los botones con lucecicas como si fueran algo importante?
Como se suele decir, nunca llueve a gusto de todos y por cierto aquí ahora también esta lloviendo. Mañana no sé si podremos ir de senderismo con la ilusión que le hace a mi santo- ☺ ¡ninguna, diría yo!
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