Este año se me ha ocurrido ir a las rebajas de Enero ¡qué osada! A ese Gran Almacén de apellido británico. Estuve ayer lunes a las diez y…, o se vendió todo lo que habían sacado a las rebajas el sábado o lo tienen escondido para los amigos o no entiendo nada.
Para mi santo, de su talla y en rebajas, solo encontré unos pantalones, que como es lógico se los compre aunque no se merezca que le compre pantalones, je, je, que hoy me ha dejado sin café de media mañana.
Haber ropa guapa había, pero no rebajada. Yo pensaba que rebajaban todo, pero veo que no. Seré cortica de entendederas ¿no?
Luego fui a la sección de señoras, ahí fue peor, aparte de que todo era feo, lo que había de mi talla era sin rebajar también, y lo que estaba rebajado, ni había talla para señoras normales tirando a gruesas ni se le esperaba, nos dijo una señorita, eso sí, muy amable.
Yo uso una talla —¿por que no lo voy a decir? – la 50, aunque se supone que la mayoría de las mujeres llevan una talla 36, 38, 40, a lo sumo una 42, pero resulta que de esas tallas hay un montón, y en cambio de la mía no. ¿Como es eso?, o la mayoría no lleva esa tallas y nos engaña, o es que hacen menos ropa de las talla que para mi son normales en señoras de cierta edad.
Luego en el anuncio de la tele dicen “si no lo encuentra en su tienda se lo buscamos en cualquiera de las que tenemos”. ¡MENTIRA!, o las señoritas no tienen ganas de trabajar y no se molestan en preguntar, o algo falla.
Podíamos denunciar —sí, ya— pero ¿para qué?, para cuando me traigan el abrigo que yo quería, ya será verano. ¿Y por qué no rebajan más que ropa? ¿para cuando dejan las rebajas de los billetes de tren, de las barras de pan, del aceite de oliva, de la pechuga de pollo?
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