El sexo no siempre es amor. El amor no es sólo sexo

Pues por fin ha terminado el GH 12, el más soso y aburrido de la historia mundial de Telecinco.

Yo he seguido todos los GH menos este; ayer intente ver la final pero en cuanto vi quien ganaba, lo cambie en busca de series o películas. Será muy buena chica la que ha ganado, pero no se puede estar siempre gritando, y porque sea ella la que ha llevado la iniciativa con el pobre —y tonto aunque muy joven— chico no tiene que obligar a que la quieran; para mi lo ha acosado pero como es mujer pues no pasa nada (y lo digo yo que soy mujer).

Creo que a veces confundimos las cosas. Ya sé que los tiempos han cambiado por suerte y peleas de muchos, y hoy somos iguales hombres y mujeres, pero tenemos que tener respeto con nosotras mismas, si queremos que nos respeten.

Ya sé que las feministas no estarán de acuerdo conmigo. Ayer mismo estuve en una presentación de un libro, y en donde luego hubo un coloquio, y precisamente estuvimos hablando de estos temas, del respeto que tenemos que tener unos con otras y viceversa, que somos personas no animales.

Los animales se aparean para procrear, nosotros somos mas inteligentes y lo hacemos —mejor dicho lo hacíamos— por amor y sentimientos, con cariño, cuando teníamos confianza y algo más que la química alterada.

Ahora no. Ahora según decía una ayer en la tertulia, si a una chica le gusta un chico a la primera de cambio ¿por qué no le va a decir que se quiere acostar con él? Nos hemos ido desde el nada porque era todo pecado, al “aquí te pillo, aquí te mato” dando igual con quien, con qué sexo, por qué, para cuanto, quien comienza, quien acaba o para qué sirve.

En fin que me estoy liando un poco y no se si llegarais a entender lo que quiero decir. Ya sé que el sexo es muy importante en una pareja; pero para mi no es lo más importante dentro de un matrimonio o en una pareja; para mi es más importante saber que está ahí, que hay una caricia, un beso, estar juntos en todos los momentos, buenos y malos. Compartir, dialogar, mirarse y adivinar, quererse con respeto. Y sexo cuando toca, pero no como única herramienta de intercambio. Vamos, que lo de cambiarnos fluidos lo veo menos importante que lo de intercambiarnos miradas y complicidades.

En fin que el “aquí te pillo y aquí te mato” delante del todo el mundo, no es que sea para premiar a nadie. Y esos gritos tan violentos es una manera de decirle a todo el mundo. Ha ganado la pareja violenta por encima de todo, y precisamente en tiempos en los que todos estamos —o deberíamos estar— en contra de todo tipo de violencia. ¡Dios qué rollo he metido! ¿no?.