2 oct 2011

“Los 40 El Musical”, un buen ejercicio de optimismo y alegría en el teatro

El viernes estuve en el teatro viendo, oyendo y aplaudiendo “Los 40 El Musical”. Aparte de durar tres hermosas horas, estuvo muy pero que muy bien.
Mi santo no iba con buena gana, con eso de que sonaba a musical simple, pensaba que solo iban a ser canciones una tras otra y cantadas por jóvenes imitadores. Pero tengo que decir que aparte de la música y los bailes también hay tres historias bastante bien escritas.
Los actores, todos jóvenes —menos uno—, y poco por no decir nada conocidos, cantan, bailan y actúan muy bien. Se les nota con ganas de hacer las cosas con energía y ganas. Hasta el actor un poco mayor que los demás, lo hacia estupendamente.
Mi santo salió encantado, después de cantar y moverse en el asiento como cualquier quinceañero que teníamos alrededor.
Ya me ha dicho —¡cuando haya otro musical tan guapo, vendremos otra vez!
No hay nada como conocer lo desconocido para saber que te gusta !o no!
En este caso en dónde el trabajo bien hecho por los jóvenes actores se contagia, sí le ha gustado. Yo con tal de que canten y bailen ya me gusta pues la música me logra cambiar el temperamento y para bien. Porque aunque sea un poco sosa —ojo, solo a veces—, me gusta cantar y bailar aunque sea sola en el salón de casa. Es una manera de hacer ejercicio, je, je. Bueno pues eso, que está muy bien “Los 40 El Musical”, y para los que no lo hayan visto y su bolsillo se lo permita, aunque sea en el gallinero como nosotros, merece la pena pasar un rato agradable.

No hay comentarios:

Publicar un comentario