Creo que mi hijo se ha equivocado de profesión, y tenia que haber estudiado cocina en cuenta de Economía. Se ha comprado un gordo libro de cocina, ¡ojo!, no de recetas, que se titula “La cocina en la antigüedad” que aunque lleva alguna receta, son pocas y de esas pocas nos esta haciendo la comida hoy.
¿Comeremos algo?; menos mal que tenemos buen estómago —digo de comer—, que nos gusta todo vamos. Otra cosa será que nuestro estómago aguante lo que le metemos dentro por muy antiguo que nos dice mi hijo que es.
De todos modos entre el cocinillas de mi santo y mi hijo, ¿cómo no me voy a engordar?, bien, habrá que comer lo que hacen, no les puedo hacer ese desprecio después de que se meten en la cocina toda la mañana.
Eso si, ya les tengo dicho que mientras cocinen que vayan limpiando, más que nada para tener platos libres para comer, aunque hoy como es a la vieja usanza, a lo mejor habría que comer todos de la cazuela y con una cuchara de madera, je, je, o con los dedos
Por que ellos guisan, recogen lo que manchan, pero luego al final como es normal, termino yo de recoger toda la cocina de todo lo que casi no se nota según ellos.
Bien, no me voy a quejar, en algo tienen que pasar el tiempo libre, y ya que no nos vamos de vacaciones haremos cuenta que estamos en otros países, con la comida nos pondremos fotos de los sitios que hemos estado y música ambiente. ¿Cómo suena la música medieval o visigoda?
Cada uno se divierte como puede y como sabe. Aunque no descarto irme algún día a la playa o la montaña. Siempre que no tengamos algún médico por el medio.
Me acaba de decir el cocinillas que el primer plato pica, ¡ya vamos mal!, y creo que es una sopa, ¿una sopa picante?
De donde será, le pregunto: –de los Andes— me dice como si todos supiéramos donde están los Andes, que es Sopa Andina, ¿pero no es allí invierno?, pues por eso es picante, me dice. ¿Pero la “Andina” no es una crema para decolorar el vello del bigote?
Lo que digo, no se si comeremos hoy. Bueno me vendrá bien para la dieta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario