Vengo, para no variar, MUUUU cabreada. Pues que he ido a comprarle pantalones para mi hijo y casi no encuentro de su talla. Y no es que tengo una talla especial —la 50— pero esa debe ser ya talla de toro —ya que la 50 para las mujeres debe ser la de vacas—; ¿pues no me dicen en algunas tiendas, que solo tienen hasta la 46?
Vamos, yo estaba al corriente de los problemas para encontrar las tallas grandes en las mujeres, ¿pero ahora también nos van a decir cómo tienen que estar los chicos jóvenes?
Bueno, esta claro que hay mas flacos que gordos en la viña del Señor, pero hombre, al final igual que hay tiendas para “gorditas” tendremos dentro de poco tiendas para “gorditos”. Que a lo mejor hay y yo no me he enterado, que todo puede ser, pero hasta ahora no habíamos tenido problemas de tallas con los hombres de mi casa.
Así que aparte de cansadísima, he venido cabreadísima —cosa rara en mí—, porque encima hay otra; son mas caros los de la talla 50, encima de que no hay los modelos que quieres y te tienes que llevar al final lo que sacan las tiendas, pues van y te lo cobran más caros, encima que les haces el favor de llevarte lo que quieren ello/as.
Menudo trauma que me ha cogido el chaval, encima ahora hay que pagar psicólogo, je, je. Ya le he dicho, como viene el buen tiempo, en verano vas con calzoncillos de colores y así iras mas fresco.
Creo que la he jodido, pues buenos son a esta edad. Como me haga caso para fastidiarme, me tiraré de los pelos. Pero no, a estas edades nunca hacen caso a los padres, estoy salvada.
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