Nos acaban de dar una buena alegría. A mi yerno ya no le tienen que poner mas quimioterapia de la gorda, parece que todos esos extraterrestres que tenía —que eran bastantes— han desaparecido. Queda uno pequeño por fuera del estomago, pero a ese entre todos lo vamos a echar pronto.
Ahora tocas mantenimientos, pero ni radioterapia, ni quimio agresiva, ni medicaciones fuertes en casa. Unos años de fuerte control para evitar nuevos problemas, pero lo gordo ha pasado y la tranquilidad y felicidad nos vuelve a rodear.
Hemos pasado unos meses malos, sobre todos ellos —mi hija y su marido— pero con la medicación y con el estado de ánimo que ha tenido él —que eso vale más que nada— pues casi lo ha superado.
Ahora toca unos años de estar con el alma en un vilo, pero de momento estamos todos muy contentos. Poco a poco parece que va saliendo el sol y al final saldrá para todos, para ti también hija, que te has portado como se tienen que comportar los adultos, aguantando todo los dos juntos.
Solo quería haceros partícipes de nuestra alegría y deciros que se sale de esta enfermedad tan difícil de nombrar que es el cáncer. A todos los que tengan algún familiar o persona cercana, mucho ánimo, que de la crisis no sé si saldremos, pero de esto se sale, uniendo un poco de suerte, otro poco de ayuda de quien sea y mucho ánimo y fuerza del enfermo.
Un abrazo para los médicos, sobre todo para el hematólogo al que yo no conozco, pero mi santo si.Por como han sabido trasmitir con la información justa, todo un proceso largo y complicado, pero con sus palabras sé que mis hijos lo han llevado mucho mejor. Y todas y todos los amigos que han estado pendientes de nosotros, un beso muy fuerte.
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