Esto de los cantantes famosos, o viejos famosos casi cantantes, los son muchas veces por no conocer su vida privada los que nos creemos todas sus tontadas. Por que como cantantes pueden ser buenísimos, pero como personas a veces, dejan mucho que desear y se nos mueren los mitos con solo pensar en ellos en posiciones humanas.
Todos conocemos a Al Bano y Romina Power, y nos pensábamos que eran un matrimonio bien avenido hasta que se separaron, casi el ejemplo de amor juvenil que todos quisiéramos haber copiado, pero ahora nos esteramos por sus bocas que se llevaban mal desde casi siempre.
Cada uno de ellos dice una barbaridad del otro, a cual peor. ¿Pero no podría ser que aunque no se lleven del todo bien hayan hecho un pacto, para cobrar los dos y así sacarse un dinerillo toda la familia?
Por que no solo hablan el padre y la madre, Al Bano y Romina Power, si no que también se llevan sus dineritos los hijos. En resumidas cuentas que desde que desapareció la hija Ylenia aquí están sacando beneficio todos.
Si lo que quiso la hija fue que se amargaran todos con su desaparición —provocada en sus últimas consecuencias por ella o no—, la pobre es la única que ha perdido. Por que los demás se están haciendo con un buen fajo de dineros enseñando sus bragas sucias.
Yo lo que no sé muy bien ahora, es qué pinta la Lydia Lozano en toda esta historia, que nos sale vestida en las fechas clave como si fuera ella la que ha perdida la hija Ylenia. De llorona de película de miedo y con cara compungida como si estuviera estreñida profunda. Hasta el peinado se lo pone descuidado y sin peluquería, para dar más pena.
Si ahora están discutiendo entre el matrimonio, que si me has pegado que si te has llevado las casas, que si tú te drogas más que yo, ¿qué tiene que ver Lydia Lozano en todo esto?
Luego se queja la periodista llorona, Lydia Lozano, pero es que ella parece que tampoco quiere olvidar lo que hizo o dejó de hacer. ¿No es periodista? pues ella investigo, le salió mal y punto pelota. Como me imagino que le pasara a cientos de periodistas. ¿O acaso no fue una equivocación y si una manipulación? Pero el caso es que aquí siguen todos con lo mismo. Después de mucho tiempo siguen llorando o riendo, según el día y el guión. Al final voy a ser mal pensada y voy a imaginarme que van todos a medias. Todos menos la muerta.

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