Hoy nos hemos ido a pasar el día a la nieve (mi santo esposo y yo) y hemos jugado como dos críos, tirándonos bolas, y bajando en el trineo. La poca gente que había, (pues es martes), se nos quedaba mirando, porque un poco de ridículo debíamos hacer, pero chica, hay que disfrutar de la vida y mientras no molestes a nadie, quién me va a prohibir que me divierta; bastantes cosas nos prohíben ya, como para no disfrutar.
Y aprovechando que estábamos lejos de casa pues hemos comido en Jaca (Huesca), muy bien, pero que muy bien.
Como dos reyes, en un restaurante muy majo y muy bien servidos, con tu aperitivo, una ensalada de palito del océano, pero que llevaba hasta caviar (sucedáneo), un salmón relleno de queso con salsa de pimienta verde y acompañado de verduritas y un puré de calabaza que estaba buenísimo; de postre, puré de manzana asada con requesón y nueces más miel de caña, y con los cafés nos han sacado azúcar de varias clases (cuatro), y un platito con bombones y caramelos, por supuesto vino con la comida, aunque la copa ya la hemos dejado para otra vez que luego había que conducir.
Era menú del día y hemos salido la pareja por 34 euros total. El restaurante es “El Portón” y hay que tener en cuenta que los días laborables todo es más barato en los restaurante.
Hemos dado una vuelta por Jaca que aunque ya habíamos estado muchas otras veces, las cosas no se ven igual de un viaje a otro, depende del animo y las ganas que tengas, y esta muy bien, aunque a mi la montaña para pasar un día bien, pero para más tiempo, nada.
Donde este la playa, pasear por la orilla descalza, que te de el agua en las piernas, no sé, es una gozada, claro que, cada uno disfruta con lo que le gusta y eso es lo bueno de la libertad.
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